Las 5 librerías más lindas y mágicas de París

Siempre quise conocer más sobre librerías en París, la verdad es que le dedico tanto tiempo a los museos y galerías que a veces olvido descubrir este fascinante mundo. Mientras escribo este artículo seguimos en cuarentena en París y la mayoría de los comercios están cerrados y,  para mi agradable sorpresa, en Francia las librerías están consideradas como comercios de primera necesidad. Tomar café en la calle, andar en bicicleta y visitar una librería son de los pocos placeres que podemos disfrutar en París, hasta, por lo menos, hasta mayo.

Me encantó explorar  y descubrir estos lugares, aunque a algunos ya los conocía. Fue  realmente una tarea difícil, me quería comprar libros en todas!   Así que si sos fan de los libros te comparto mi lista de librerías más lindas y mágicas de París!

Taschen

La pongo primera en mi lista porque soy fanática de esta editorial y librería alemana.  Si te gusta el arte es la librería que tenés que visitar. Tiene varias sucursales en el mundo, la primera que descubrí fue la de Soho en NYC.  Fui muy feliz el día que la encontré en París. Se encuentra en una callecita de Saint-germain-des-prés y lo sigo siendo cada vez que la visito y reconozco que siempre me llevo a casa algún ejemplar. Podés descubrir libros de cine, artes plásticas, arquitectura, entre otras disciplinas. La fotografía de las ediciones es increíble y un dato importante: están todos en francés e… Inglés! Los precios son super accesibles. No te la pierdas!

2 Rue de Buci, 75006

Shakespeare & Co

Vista desde el 1er piso

Esta librería se convirtió en un clásico gracias a la película Antes del atardecer, escenario donde los protagonistas se reencuentran. Tenés que estar preparado porque la visitan cientos de turistas diariamente, es un lugar de paso obligado cuando la gente visita el barrio latino. Pero más allá de su fama tiene una historia increíble! Fue fundada en 1919 y durante el siglo XX era visitada por grandes escritores estadounidenses como Hemingway, Scott Fitzgerald y Jame Joyce. El lugar es realmente mágico y te paso un tip: tiene un segundo piso escondido y se accede a él a través de una escalera que se encuentra a la derecha de la librería. Este piso recrea la habitación donde dormían algunos artistas, y lo más increíble es que tiene una ventana con una vista única de Notre Dame. Además si querés hacer una pausa, al lado de la librería abrieron un café temático. Te recomiendo que la visites cuando andes por el barrio latino, no te vas a arrepentir!

37 Rue de la Bûcherie, 75005 Paris

Jousseaume

Si tuviese que resumir la experiencia de visitar esta librería sería: “un viaje en el tiempo”. Se  encuentra escondida  en la Gallerie Vivienne, una de las tantas galerías cubiertas (una más linda que la otra). Además de que el entorno sea un sueño ofrecen una gran variedad de libros usados, fotos, postales estilo años 90) . Ideal si querés llevarte un pequeño souvenir ( que en francés significa recuerdo). 

45-46-47 Galerie Vivienne 75002 Paris

Galignani

Lo más increíble de esta librería es su historia. Además de ser la primera librería anglosajona del continente europeo, tiene más de 200 años , y su fundador la creó justo después de la Revolución Francesa, lo que en su momento era un riesgo porque el público que leía en otros idiomas era muy reducido en esa época. Perteneciente a una importante familia  de editores, se encargaron de promover la cultura anglosajona en Europa y fueron los propietarios de uno de los periódicos más importantes de la época: “Galignani`s messenger”.

Ubicada en el corazón de París, dos siglos después sigue siendo un icono de la literatura anglosajona en la ciudad de la luz. Si la visitás aprovechá para pasear por los magníficos jardines de Tuileries, están justo enfrente!

224 Rue de Rivoli, 75001

Les bouquinistes de la Seine

No es propiamente una librería pero es un lugar perfecto para descubrir libros usados, afiches, recuerdos. “Bouquin” quiere decir libro de manera informal, y los bouquinistes serían algo así como los libreros. Desde el Louvre hasta las inmediaciones de la catedral de Notre Dame se encuentran estos “puestitos” a las orillas del Sena. En 1859 autorizaron que se instalen a orillas del Sena. Se considera la librería a cielo abierto más grande del mundo y los bouquinistes se convirtieron en un icono de la cultura parisina al punto que fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Además de tener una variedad de libros increíbles por 2 o 3 euros (lamentablemente todos o casi todos en francés). Un clásico parisino que tenés que descubrir!

¿Cómo aprender francés?

Una de las preguntas qué más me hace la gente cuando le cuento que estoy viviendo en París es: hablás francés? es fácil? Y la verdad es que es un idioma bastante complicado, lleva bastante tiempo aprenderlo, y esfuerzo, sobre todo para aprender a escribir correctamente. En Francia hay un dicho que dice que ni siquiera los franceses hablan correctamente su idioma, porque es tiene muchísimas reglas y es difícil aprenderlas todas.

Una de los temas más complicados para mi es, sobre todo al principio, la pronunciación. Ninguna, o casi ninguna palabra se pronuncia como se escribe, realmente para mi fue un verdadero desafío.

Y otra de las preguntas que siempre me hacen es si ya sabía hablar francés cuando vine a vivir, la respuesta es NO. Aunque había estudiado un poco en el Centro Universitario de Idiomas de la UBA, fascinada por la cultura francesa y sobre todo por el cine de la Nouvelle Vague, la verdad es que nunca me tomé muy seriamente el el estudio del idioma, simplemente era una pasatiempo que me acercaba un poco a esa ciudad que tenía tan idealizada y que no sabía que algun dia llegaría a ser mi ciudad (Me hubiese tomado más serio el estudio).

Mis conocimientos eran tan pocos que me llevó casi un año ir a la panadería y que no me respondan en inglés ( ese tema es bastante frustrante para los que intentan aprender o practicar el idioma, los franceses no te la hacen para nada fácil).

Entonces: ¿cómo hice para aprender francés? la verdad dándome la cabeza contra la pared, insistiendo y no frustrandome cuando me decían no entendí nada ( una frase que a los franceses les encanta). Me acuerdo que todo el primer año cada vez que había una reunión o una fiesta yo terminaba con dolor de cabeza, y entendiendo menos de la mitad de lo que la gente hablaba, de vez en cuando había alguien que me hablaba en inglés pero yo quedaba afuera de todas las conversaciones. Nunca me di por vencida 🙂

Otra cosa que me ayudó mucho fue mirar películas, series y escuchar la radio en francés, me llevó bastante tiempo pero fue una de las mejores herramientas.

Y si bien el día de hoy me puedo comunicar y  comprendo todo lo que me dicen siento una incapacidad de poder expresar mis ideas y opiniones como lo hago en español.

Otro tema que me sigue costando es pronunciar perfectamente las palabras. Con el tiempo me fui relajando porque ellos me enseñaron que mantener mi acento es una manera de preservar mi identidad.

Entonces, si querés aprender francés te recomiendo que lo hagas sin dudarlo. Si podés estudiar con un profesor genial, sino existen varios libros con los que podés aprender por tu cuenta, tratá de ver muchas películas y series, sumate a charlas donde se practique el idioma y sobre todo se muy perseverante!

Los mejores cafés de París

¿Hay algo más lindo que disfrutar de un rico café en la terraza de un bar a la mañana? Me encanta el café y siento que mi día no comienza hasta que haya tomado mi bendito café. Y… te cuento que lamentablemente París no es el mejor lugar para disfrutar de un buen café (lo contrario a Italia que a donde vayas es exquisito).

Aunque los franceses tomen mucho no son muy exigentes con el tema así que en general te encontrás con cafés aguados, o muy fuertes, o quemados. Salvo que tengas suerte y justo caigas en un bar donde hagan un buen. Por eso, y porque desde que me vine a vivir a París me dediqué a buscar los mejores cafés de la ciudad, te comparto mi lista de mis lugares preferidos. Seleccione en diferentes barriosii para que dependiendo de donde estés puedas probarlos.

La caféothèque

Este lugar me resulta realmente mágico, además de que su ubicación es inigualable en Le marais justo frente al Sena, si nos sentamos en la terraza podemos observar Notre Dame. Su interior es también único con pequeñas salas donde la gente se reúne con amigos a disfrutar. Podés elegir diferentes variedades de café y su preparación con distintos métodos, a los fanáticos del café les encanta eso! Mi preferido: el cappuccino estilo Brooklyn,NY.

52 Rue de l’hôtel de Ville

Café Kitsuné

Kitsuné comenzó como una marca de indumentaria de inspiraciones japonesas y con el tiempo a partir de su éxito creó su café que ya se convirtió en un clásico de París. Tiene diferentes locales pero mi preferido se encuentra en los jardines del Palais Royal. Si tenés ganas de probar otra cosa te recomiendo que pidás el matcha latte, una bebida en base a té verde que está muy de moda en este momento, es muy rica y sana. El lugar es chiquito y tiene mesas en él jardín. A mi encanta pedirlo para llevar y tomarlo en la fuente que está al lado del café. Es uno de mis planes preferidos en París!

PAL Royal, 51 GAL de Montpensier, 75001

Spree Café Galerie

Este lugar es una genialidad en pleno corazón de Montmartre.  Antiguamente funcionaba como galería de arte y en este momento conjuga  sus exquisitos cafés con increíbles obras de arte contemporáneo. Si te sentás en la vereda tenés una vista única de las callecitas de Montmartre.  Su propietario, León, se encarga de preparar un  café exquisito, y hacerte sentir como en casa. Un verdadero plus: su vajilla de diseño, toda la onda. ¡Imperdible!

11 Rue la Vieuville, 75018 Paris 

Tabac

 A 100 metros de la estación de  Abbesses podés encontrar este café que pasa desapercibido porque tiene la apariencia de un kiosko. La atención es  increíble y los cafés riquísimos. Hay muchos habitués  y los precios son normales, no para turistas

1B Rue Ravignan, 75018

Lomi

Si querés descubrir una parte menos tradicional del distrito 18 (muy cerca de Montmartre)  te recomiendo este lugar. Son expertos en café y tienen su propia marca que distribuyen en varios cafés parisinos, y hasta funciona una escuela de baristas. Su ambiente minimalista tiene mucha onda y el café es increíble sobre todo si te gustan los capuccinos y los latte ( su latte fue ganador como el mejor de París en varias oportunidades).

3 ter Rue de Marcadet, 75018 

Kott Cafe

En el corazón de Parmentier barrio 11 ( uno de mis preferidos porque es cero turístico y tiene barcitos y restaurantes increíbles que tenès que descubrir si o si) encontrás este cafecito digno de una peli. Está ubicado en un pasajito super tranqui lleno de restos y bares. El lugar es chiquito pero tiene toda la onda. Sus dueños, una coreana y un francés son super agradables y hacen lo posible porque disfrutes al máximo la experiencia. Un dato: el cappuccino lo sirven con dos shots, primera vez que voy a un café y el cappuccino no incluye uno solo. Si te gustan las cosas dulces podés disfrutar helados y especialidades coreanas. Me encantó!

19 Rue Ternaux, 75011 Paris 

Café Oberkampf

Tambièn en el barrio 11 en una callecita un poco escondida encontràs este mini cafecito encantador con jugos naturales y tortas y un café riquísimo. Las chicas que atienden son muy simpáticas!

3 Rue Neuve Popincourt, 75011

Me falta probar varios que tengo agendados que estuvieron cerrados debido a las restricciones. Estoy ansiosa por volver a disfrutar los cafés en las vereditas de París!  🙂

Emily in Paris, una serie alejada de la realidad?

Hace unos días Netflix estrenó una de las series más vistas en el mundo: Emily in Paris. Como su protagonista, también me mudé a vivir en esa ciudad, así que me intrigó bastante. Lo primero que pensé fue que iba a ser una serie idealizada y muy lejana a la realidad. De hecho, no fue bien recibida por los medios franceses, porque consideran que la parodia de sus personajes es extrema y está llena de clichés. 

Si bien es verdad que los personajes aparecen caricaturizados, el escenario y las situaciones son bastantes cercanas a lo que me tocó vivir al principio, y me sentí muy identificada hasta el punto de reírme de mí misma en la mayoría de las escenas.

Los jardines del Palais Royal, donde la protagonista se reunía con su mejor amiga

Hace tres años que vivo en París y los primeros meses fueron bastante lejanos al idilio que imaginaba. Mi primera gran sorpresa fueron los departamentos. Lo que cuenta la protagonista es muy real: ella vive en un quinto piso sin ascensor. En mi caso me tocó aún peor: estoy en un sexto piso por escaleras y, aunque terminé acostumbrándome, cada vez que me iba o volvía de viaje con valjas o que tenía que bajar y subir para lavar la ropa (tener un lavarropas en París es casi imposible, sobre todo por el tamaño de los departamentos) me quería morir. Además, encontrar un alquiler es casi una misión imposible, te piden muchísimos requisitos que a veces ni los propios franceses pueden cumplir. Existe tanta demanda que cuando se publica una oferta hay por lo menos veinte personas más esperando para visitar el mismo departamento. 

La protagonista tuvo la suerte de que le consiguieran un espacio que está bastante lejos de ser una chambre de bonne (como citan en la serie), que sería algo así como el lugar donde viven las empleadas domésticas. Esos lugares en general no tienen más de 11 m2 y el de Emily es bastante más amplio. Reconozco que no me molestó demasiado la experiencia de habitar un mini departamento porque, como se muestra en la serie, París vive en sus terrazas (a diferencia de Argentina, se llama «terrazas» a las veredas). Los departamentos son tan pequeños que la gente prefiere reunirse en bares, tanto en verano cuando el clima acompaña, como en invierno y con calefacción en las terrazas.

Mi relación con el idioma y la gente también fue otro aspecto crucial. Cuando llegué apenas hablaba francés y hacía todos mis esfuerzos para comunicarme, pero me costó un año pedir un croissant en una panadería y que no me respondieran en inglés. Me resultaba muy difícil entablar una conversación porque no todos hablan inglés (al contrario a la serie, en donde todos los personajes principales lo hacen)  y casi nadie conoce el español. Otro tema cultural es el tono: con el tiempo me acostumbré a hablar bajito, porque para los franceses es una falta de educación hablar muy alto, como se ve en un capítulo de la serie en el que uno de sus compañeros de trabajo le pide a Emily que deje de gritar. En mis primeros meses en París toda la gente me miraba cuando hablaba…

Y el tema de la pronunciación es tal cual lo muestran; por más que intentaba e intento pronunciar las palabras mejor, me resulta imposible llegar a la pronunciación perfecta. Con el tiempo y aconsejada por los mismos franceses, dejé de preocuparme: «No pierdas tu identidad -me dicen- es linda y te distingue». También, como le pasa a la protagonista, cuando tengo la oportunidad me hace muy feliz y me relaja usar mi idioma, porque se hace muy pesado hablar todo el tiempo en francés. 

París es una ciudad un poco complicada, donde nada es tan fácil como uno lo soñó o se lo imaginó a la hora de tomar la decisión de mudarse. Aunque no me arrepiento y siento que todo valió la pena,  sobre todo cada vez que camino por el río Sena, disfruto un café en Le Marais o recorro el museo Pompidou.

Los mejores vintages de París

Si sos fan de los vintage, en París podés encontrar miles de lugares con ropa increíble y a un precio super económico. Desde que me mudé acá fui convirtiendo poco a poco en una consumidora más responsable. Comencé a tratar de dejar de comprar en grandes tiendas y a visitar asiduamente locales vintage, donde por unos pocos euros podés encontrar realmente piezas increíbles y lo mejor te aseguro que no vas a ver a nadie con la misma ropa que vos. Una buena manera de ahorrar pero sobre todo de ayudar al planeta.

Los franceses son muy fanáticos de los vintage y hasta tienen su propia expresión en francés y se dice chiner que significaria algo así como: estar atento a las oportunidades de compra de muebles, ropa, accesorios antiguos.

Te comparto mis vintage preferidos en París:

Vintage désir

Ubicado en la calle principal del barrio más chic de París (Le Marais), es, muy contrario a lo que uno pensaría, uno de los más económicos. Siempre encuentro alguna pieza imperdible, por 10 euros. Las prendas están en muy buen estado! Realmente uno de mis preferidos. 

 32, rue des Rosiers

Chine machine

Si te gustan las piezas realmente originales Chine Machine es el lugar que tenés que visitar. Además de estar ubicado a dos pasos de la estación Abbesses, en el corazón de Montmartre, podés encontrar prendas únicas de marcas muy conocidas y a precios muy accesibles. Desde lentes de sol chanel hasta pañuelos Hermes. El único tema es que es un poco una lotería, hay días que encontrás prendas y otros nada. una amiga una vez compró un trench Hermes a 80 euros, realmente único! Un consejo: visitá la página porque tienen algunas prendas que no hay en los locales.

http://www.chinemachinevintage.com/

Free p`star

Es conocida como la tienda vintage más antigua de París y tiene 5 locales. El gran negocio de este lugar es revolver las ofertas por un euro, pantalones, polleras, camperas. Si te gusta buscar y le dedicás tiempo siempre encontrás prendas increíbles. El único temita negativo es que siempre está llenísimo y los pasillos son super estrechos así que hay que ir con mucha paciencia. Las últimas veces que los visité siempre salí con una prenda, mi última adquisición una bufanda Burberry que hacía mucho buscaba.

http://www.freepstar.com/

Vintage by Ramin

Este mini local que descubrí de casualidad porque pasa casi desapercibido tiene todas sus prendas a 5 y 15 euros. No hay muchísima variedad pero siempre tienen piezas de tendencia. Cada vez que voy encuentro algo que me encanta, así que si andas por Chatelet o Le Marais te recomiendo que lo visites.

64 Rue de la Verrière

Rose market vintage

Si lo que buscás es encontrar una pieza única de alguna marca como Celine, Yves Saint Laurent o Chanel este es el lugar. Su dueña se dedica exclusivamente a recolectar piezas increibles. Pañuelos Hermés, sobres chanel, carteras. Para tener en cuenta: los precios comienzan a partir de 150 euros para nada caro teniendo en cuenta cuanto valen esas piezas nuevas.

https://www.rosemarketvintage.com/fr/

Kiloshop

Lo que más me gusta de este lugar es su originalidad porque el costo de la prenda depende del peso. La ropa está dividida en diferentes colores y cada color equivale a un precio por kilo, entonces para saber el precio tenés que pesarla. Tienen bastante variedad pero son bastantes caras en general.

http://www.kilo-shop.com

Vinted

Por último si te copa hacer compras online en Francia está muy de moda la aplicación vinted y podés encontrar muchísimas prendas a muy buen precio y te lo mandan al hotel o donde estés alojado.

https://www.vinted.fr/

Francia, el arte del picnic!

Una de las actividades preferidas de los franceses, como casi todo el mundo sabe, son los picnics, y si querés disfrutar la ciudad como un verdadero francés  es un plan que no te podés perder! 

Principalmente en verano, los parisinos se reúnen en grupo  en parques, lagos, ríos para compartir comida, vino, y sobre todo charlas. Los departamentos en París son super reducidos, hay hasta de 8 m2, y es una de las razones por las cuales la gente invade las calles y los espacios verdes para compartir el tiempo libre con sus amigos.

El origen del Pic-nic fue, obviamente, en Francia! Ya  en el 1600  los franceses se reunían en grupos para disfrutar del «picoteo» en grupo y es de allí que  proviene su nombre, según  Wikipedia ;),  de dire nic, en francés lo que significa cosa de poco valor y hace referencia a que cada uno aportaba algo para compartir. Ya en el 1700  se comenzó a utilizar el termino en Inglaterra como picnic y se fue expandiendo por el mundo a lo largo de los años.

Y claro, como no podía ser de otra manera te compartimos todos los tips para disfrutar de un verdadero picnic en París:

Los esenciales:

_ El vino: un verdadero infaltable para los franceses, en verano prefieren el rosado (como Cote de Provence) o el blanco (como Chardonnay si les gustan los vinos frutados y Sauvignon Blanc si prefieren los blancos). En media temporada suelen optar por los tintos, (Como Cote du Rhone, según dicen los franceses es un vino que nunca puede fallar, o un Bordeaux o Bourgogne si preferís alguno con más cuerpo. Si te gusta el Malbec aunque los malbecs franceses no tienen mucha fama hace poco probé uno que me encantó: clos de la coutale( podés ver la botella en la foto de abajo) y lo encontras por 7 euros en la tienda de vinos Nicolas. Un dato muy importante: el alcohol es tan importante en la vida francesa que al contrario de la mayoría de los países, está permitido tomar en la via pública 😉 Podés encontrar vino en todos los supermercados o cómo te decía en la tienda Nicolas, que aunque es bastante masiva suelen atender muy bien y aconsejar vinos originales, o sino para mi lo ideal encontrar alguna tienda de vinos particular ( en francés se dice Cave) donde te van a saber asesorar. No te olvides de los vasos que en francés se dice: goblet y de un destapador tire-bouchon, si no nunca a faltar un francés copado que les abra la botella 🙂

– Los quesos:

los mejores del mundo son franceses y es el momento perfecto para disfrutar de su innumerable variedad, te recomiendo elegir por lo menos dos de cabra como la bouche fondant, el mundialmente conocido camembert, un queso azul como el roquefort y alguno de pasta dura como el Cantal.

Y obviamente no puede faltar la estrella: la baguette! en este caso te recomiendo elegir la tradition,  es mucho màs crujiente y sabrosa que la baguette normal. Si querés probar algo más especial hay miles de variedades de pan en las boulangeries ( panaderías)

Y el postre…

en Francia tenés que probar la patisserie! traducido al español sería: las tortas. También reputadas como algunas de las más ricas del mundo, es imperdible el eclaire au chocolat o una tarta con crema y frutillas, o por que no los exquisitos macarons que son como pequeños alfajorcitos de colores exquisitos de sabores como pétalos de rosas, pistacho y chocolate. Los lugares más reconocidos para comprar macarons son Ladurée y Pierre Hermé

Por último, para que este momento sea realmente inolvidable  hay que elegir el escenario! En Parìs tenemos miles de opciones pero estos me parecen los mejores para un primer picnic y sentirte como en una peli. 

Obviamente la primera elegida es la imponente Torre Eiffel. Lo ideal es acercarse al atardecer y buscar un pequeño espacio en Champs de Mars o en los jardines de Trocadero! A partir de las 22 horas (verano) se enciende el juego de luces De la Torre casa 30 minutos, imperdible!

La torre Eiffel:

El Sena

Sin dudas el Sena es uno de los lugares más lindos y plácidos de la ciudad, un picnic al atardecer es encantador.  Lo ideal es descender a la altura de Palais Royal en la línea 1 y buscar un lugarcito en la orilla para ver caer el sol. 

Canal Saint martin

Una opción màs canchera y donde los franceses se reúnen todas las tardes y noches.  Muchas  veces los picnics terminan en fiestas con música o en los bares de la zona.

Parque de Buttes Chaumont

Para mi el parque más lindo de París.  Lo ideal es buscar alguna colina y disfrutar de las hermosas vistas de París y de la música que la gente escucha. Importante! El parque cierra a las 22 horas salvo en verano que algunas noches está abierto toda la noche.

La colina de Sacre Coeur:

 En los jardines de la hermosa basílica de Sacre Coeur, otro lugar imperdible,  podés disfrutar de  noche de  Sacre Coeur encendida, y de  las mejores vistas de París. Un dato: por las noches hay unos show increíbles, de música, con fuegos.

Jardines de Tuileries

Con privilegiadas vistas sobre la Torre Eiffel y el

Museo del Louvre estos jardines nos hacen sentir en otro siglo, una experiencia única!

Donde salir de fiesta en París

Una de las primeras cosas que pregunto cuando llego a una nueva ciudad es… donde salir como un local, prioridad total para mi. Por un lado es porque me encanta salir, tomar, disfrutar de la música, por otro porque me parece un lugar perfecto para conocer un poco más la cultura y la gente. Un dato particular, que me asombró mucho cuando llegué, es que la gente en París sale a cualquier edad. En Argentina al tener más de 30 me sentía mucho más limitada en cuanto a la oferta de lugares. Entonces cuando comencé a descubrir París me sentí en el paraíso.

Mis primeras salidas acá fueron increíbles, solo un pequeño gran detalle que me dejó helada, la mayoría  de los bares-boliches cierran a las dos de la mañana. Es verdad que los franceses se reúnen muy temprano, muy contrario a nosotros que empezamos el pre-boliche a las 12 de la noche. Son fans del “apéro”  y se reúnen en bares para disfrutar el happy hour, que ojo no se trata de un dos por uno, solo es un poco más barato,  y sigue siendo un buen plan porque una pinta en París puede llegar a salir hasta 8 euros, y los tragos 10.

La otra opción, que a los franceses les encanta,  es hacer el apéro en casas. Se reúnen en el departamento de alguien y cada uno lleva cosas para tomar y para picar.  Un dato de color: son fanáticos de los juegos de mesa cuando están con sus amigos.

Y otro detalle que me parece super importante es que la mayoría de los lugares cierran a las dos de la mañana  por eso les recomiendo para no quedar varado en el medio de la noche… siempre tengas previsto una fiesta, para encontrarlas yo siempre uso Facebook local, y nunca me falla.

Oberkampf

Son dos calles paralelas ( Jean pierre Timbaud y Oberkamp, a la altura de Rue Saint-maur) que están llenas de bares y bolichitos muy cool. Un dato importante, para mi 😉 a las 8 de la noche los bares están llenos! Así que organízate para no llegar tarde así podés disfrutar a full.

En este barrio podés encontrar unos barcitos muy copados donde la cerveza cuesta mucho menos que en un bar normal (minimo 5 euros) En L’ express de Paris (justo frente a la estaciòn de metro de Menilmontant) venden la pinta cerveza por menos de 3 euros. Otro barcito con mucha onda es el Café Populaire en el corazòn de Oberkampf y también la cerveza cuesta menos de 3 euros.

Si querés seguir la fiesta podés ir a La Java que viernes y sábados  está abierta hasta las 6 de la mañana, y en el barrio de Belleville (10 minutos a pie de Oberkampf) podés ir al mítico Café Cherie, aunque temprano porque también cierra a las dos de la mañana.

Bastilla

La Rue de la Roquette y sus alrededores se convierten en uno de los lugares más concurridos para salir de fiesta. Miles de jóvenes se reúnen en las calles y bares para divertirse con sus amigos. En esta zona hay mucho bares bailables que están abiertos hasta tarde.

Grands Boulevards

A la altura de la estaciòn de metro Grands Boulevards hay muchos bares irlandeses donde pasan mùsica hasta tarde ( 5 de la mañana) como O`Sullivans y Café de Oz el ambiente es más que nada de turistas, o sea que si preferís conocer algo más estilo local te conviene ir a Oberkampf o Bastilla.

Canal Saint Martin/ Canal de l’ Ourcq

Son lugares increíbles para disfrutar con amigos, en primavera los parisinos se reúnen para tomar tragos y divertirse en las orillas del canal. En los alrededores hay muchísimos bares cool, el imperdible es Le Comptoir General, un lugar realmente surrealista que te transporta. Si sos fan de la cerveza tenés que ir Panam Brewery Company, tienen una variedad increíble y una terracita que da sobre el canal, imperdible!

Río Sena

En verano las orillas del río Sena se llenan de gente que se reúne en grupos a tomar y comer y disfrutar de la caída del sol, muchos llevan música así que se convierte realmente en una fiesta. A la altura de la estación Quai de la râpée de la línea 5 hay un montón de bares y boliches que explotan los fines de semana. 

Obviamente no son los únicos lugares para salir pero si mis preferidos! No te lo pierdas, Como dice el libro de Hemingway: París es una fiesta!

Datos útiles para sobrevivir en París

1- En París no existen los kioskos. 


La típica idea que tenemos nosotros no existe. Si fumás y tenés que comprar cigarrillos la única opción son los «tabac» que significa tabaco en francés, ojo que son pocos los tabac que están abiertos hasta tarde, de hecho hay muchos que están cerrados los domingos. Para reconocerlos tienen un cartel como el de la foto, al principio me costaba mucho encontrarlos porque no hay demasiados.

Un atado cuesta aproximadamente 10 euros, su precio es tan alto porque los franceses fuman muchísimo y subiendo los impuestos intentan desincentivar su consumo, aunque puedo asegurar que esta política no funciona demasiado.

2-Pedir café todo un desafío

Si querés el clásico cafecito, tenés que pedir un café, si lo queres cortado un café noissette, en cambio si te gustan más suaves y largos como los estadounidenses pedís un café allongé, ahora si por el contrario preferís los cafés cortitos y bien fuertes como en Italia pedís un café serré. El tradicional café con leche en taza grande acá lo llaman café au lait.


3- L‘ épicerie

 Estos pequeños supermercados nos salvan de todas. Están abiertos hasta tarde, tienen golosinas, bebidas frías, comidas. Lo único es que si tenés que hacer las compras no te lo recomiendo porque es mucho mas caro que los supermercados. ¿Cómo hacer para reconocerlas? generalmente tienen frutas afuera y bebidas alcohólicas a la vista.


4-La boulangerie



La traducción literal en español es panadería. Son muy fáciles de reconocer y la verdad es que abundan en París. Los franceses son tan fanáticos de las «baguettes» que te cruzás mucha gente comiéndolas solas (sin queso, ni jamón, ni nada). Existen diferentes variedades pero para mi la más rica es la «tradition» que es crujiente y tiene un gusto parecido al pan de campo. Ojo que cuando vayas a comprar tu baguette podés elegir la cocción: bien cocida (bien cuite), normal, o poco cocida.

Algunas versiones dicen que el pan es y era tan importante para los franceses que el aumento de su precio (haciendo diferencias de tarifas entre ricos y pobres) fue un detonante de la Revolución Francesa.

 Otras delicias que no te podés perder son la famosa croissant ( que sería como una medialuna salada) y el pan au chocolat ( que sería como una medialuna rellena de chocolate. Francia se divide entre las personas que eligen croissant o Pain au chocolat para desayunar, sos fan del uno o del otros, en mi caso soy más fan del croissant.

5-En el restaurante


El primer paso es esperar a que te acomoden en alguna mesa, los franceses no toman muy bien que la gente se siente sin preguntar antes. Cuando ellos salen a comer en general es toda una experiencia: primero piden el apéro, infaltable para ellos, que sería como un aperitivo. Entre las bebidas más pedidas están el champagne, cerveza y el pastis ( una bebida muy fuerte que tiene su origen en el sur de Francia con gusto a anís que se rebaja con agua e hielo. Generalmente los restaurantes incluyen alguna cosita para picotear y acompañar la bebida.
Luego piden la entrada, acompañada de algún vino especial y para el plato principal eligen otra variedad acorde a la especialidad que eligieron. Por último luego de haber degustado el postre pasan al digestivo, que es alguna variedad de alcohol fuerte como: el calvados, o la «poire» ( en español pera) que literalmente tiene una pera dentro de la botella para darle sabor al alcohol.
Detalles importantes, en París el agua es potable y es muy normal pedirla en el restaurante, nadie te va a mirar raro. Hay que pedir » une carafe d `eau si il vous plait» se pronunciaría algo asi como «un caraf do» estén atentos porque en algunos restaurantes no muy honestos se hacen los que no entendieron y les traen agua mineral y obviamente se las cobran al final.
Otro dato interesante es que si vas a pedir carne tenés que dar el punto de cocción (como en todos los restaurantes) pero teniendo en cuenta que los franceses siempre cocinan mucho menos la carne que nosotros… los puntos son: bleu, que es literalmente vuelta y vuelta, la carne está muy muy cruda comparada con nuestra manera de comerla, saignainte que es el equivalente de «bien jugosa», a point sería algo así como a punto y bien cuite, bien cocida, aunque a la manera francesa lo que significa que va a estar un poco rojita aun así que si te gusta la carne bien cocida podés pedir: bien bien cuite.

Espero que estos pequeños tips te sirvan para disfrutar más de esta increíble ciudad!

París en bicicleta

Una de las mejores experiencias que te puedo recomendar es recorrer París en bici. Recientemente la Mairie de Paris ( que sería algo así como la Municipalidad o Ayuntamiento) lanzó un plan para fomentar el uso de bicicletas en la ciudad, incrementando ampliamente el número de ciclovías. Ahora, los ciclistas (me incluyo porque me muevo a todos lados en bici) podemos recorrer una superficie mayor en mayor seguridad. 

Por eso, si te encanta andar en bici como a mi, o si tenés ganas de recorrer la ciudad de una manera divertida, rápida y económica te recomiendo que alquiles una bici, no te vas a arrepentir!

Para alquilar lo más económico es Velib’ , son las bicis grises que se encuentran en estaciones por todo París.

Para poder hacer uso de estas bicis obviamente es necesario tener una tarjeta de crédito que va a servir para debitar el monto correspondiente al periodo utilizado y también cómo garantía ante la eventual no devolución de la bicicleta.

También es necesario para poder alquilarlas contar con un smartphone.

Los planes:

Como turistas tenemos opción a dos tipos de planes:

V-découverte:

La tarifa cuesta 5 euros el día más 1 euro extra cada 30 minutos (los primeros 30 minutos son gratis cada vez que la volvés a retirar) importante saber que  durante el día se puede devolver y volver a retirar la bici todas las veces que quieras (solo hay que respetar un tiempo de espera entre que la dejas y la volves a retirar)

V-séjour

La tarifa cuesta 15 euros por una semana y la tarifa extra es la misma que la V-découverte.

Un consejo, bastante obvio, prestá mucha atención de que la bici quedé bien enganchada a la estación. Sino puede costarte muy caro 😦

Agencias de alquiler:

Si tenés ganas de alquilar una bici más pro existen varias agencias que alquilan bicicletas por día, la tarifa de una bici básica cuesta un promedio de 13 euros por medio día y 16 por un día entero.

Otra posibilidad es alquilar las bicis eléctricas  por aplicación como las rojas de Uber pero la tarifa es mucho más alta.

No lo dudes y vení a disfrutar de París en bici!

Cinco museos imperdibles en París

Si sos amante del arte como yo , París es una de las ciudades que más te van a sorprender y enriquecer. Antes de vivir acá soñaba con recorrer sus museos y disfrutar de algunas de las obras más famosas del mundo.  Su oferta es tan amplia que podemos visitar museos de todos los estilos, con el plus de que la arquitectura de algunos museos es arte por si misma.

Te comparto mi top 5 para visitar si tenés ganas y tiempo, mi mirada es super subjetiva pero creo que son imperdibles. Un dato importante: organizá tus visitas acorde a los días que están abiertos los museos, por ejemplo el Centro Pompidou está cerrado los miércoles. Si tu visita coincide con el principio del mes podrás acceder gratuitamente el primer domingo del mes.

Museo de Orsay 

El museo de Orsay se encuentra en una antigua estación de trenes

¿Sos  fanático del impresionismo? Este es el museo que tenés que visitar porque cuenta con la colección más amplia de obras impresionistas  del mundo. Está ubicado en una antigua estación de trenes que fue inaugurada para la Exposición Universal de 1900 y es una joya de la arquitectura. Entre sus obras podemos encontrar pintura, escultura, artes decorativas y fotografía  de occidente que van desde 1848 a 1914.

 Algunos de los artistas expuestos más reconocidos son: Van Gogh, Monet, Manet y Renoir. Cada vez que lo visito me convierto en la persona más feliz del mundo, disfrutar sus obras me genera un éxtasis incomparable. Una de mis obras favoritas se encuentra expuesta en este museo: Dejeuner sur l`herbe, de Eduard Manet.

Te recomiendo calcular entre dos y tres horas para visitar las salas, y alquilar una audioguía que cuesta 5 euros, realmente es super interesante.

Museo del Louvre

Pirámide del museo del Louvre

Este es el paradigma de la obra de arte en si mismo, originalmente era el castillo del Louvre y fue convertido en palacio por pedido de la famosa Catalina de Medicis.
Luego de la Revolución francesa fue destinado a funciones artísticas y científicas, en 1973 fue inaugurada la primera parte del museo. Hoy en día alberga, tal vez, la más conocida obra de arte del mundo: La Gioconda e innumerables obras renacentistas, eso sí, venite preparados porque los cuadros más importantes son visitados por mucha gente. Su patrimonio es de más de 450000 obras solamente unas 35000 se encuentran expuestas. Aunque dicen que recorrerlo llevaría días creo que vale la pena visitarlo para tener una idea y visitar las obras más paradigmáticas.

Un tip, cuando termines tu visita te recomiendo descansar en los Jardines de Tuileries, un verdadero oasis en el corazón de París. 

 Centro Pompidou

El Centre Pompidou es uno de mis lugares preferidos en París. Una de las cosas que más me llamó la atención la primera vez que lo visité fue su arquitectura: un esqueleto lo envuelve desde el exterior, mostrando toda la estructura de los diferentes sistemas mecánicos con dos objetivos: que pueda ser comprendido su funcionamiento y  liberar su espacio interior. Obviamente como todas las obras disruptivas fue un escándalo en la sociedad parisina.

Su colección  comprende arte del siglo XX y entre sus artistas más reconocidos se encuentran Picasso, Kandinsky, Matisse, Duchamp y Chagall. También funciona una biblioteca, entrada gratuita, y se proyectan películas. 

Un tip: no te pierdas de disfrutar una copa o un café en el bar del último piso, tiene unas vistas increíbles .

Museo de la Orangerie

Este museo pequeñito alberga una de mis obras preferidas y tal vez la más emblemática  de Monet, “Las Nympheas”  Son 4 obras que reflejan las diferentes etapas del sol, desde el amanecer hasta el anochecer en las plantas acuáticas de sus  jardines en Giverny.

Un dato muy interesante es que fue el mismo Monet que donó estas obras al estado francès para celebrar el fin de la guerra en 1919 y fue uno de los encargados de organizar las disposiciòn de las pinturas en dos salas.

Si visitás el Museo de Orsay, podés comprar el billete que incluye entradas a ambos museos y visitarlos el mismo día porque se encuentran super cerca ( el billete tiene validez de 2 meses o sea que no hace falta que los visiten el mismo día)

Petit Palais

Jardines internos del Petit Palais

Este museo se los recomiendo porque el ingreso a su colección permanente es gratuita, teniendo en cuenta que las entradas a los museos en París  son bastante caras y porque su arquitectura y decoración son increíbles.

El palacio fue  construido junto con el Grand Palais que se encuentra enfrente y el Puente Alexander III  para la exposición Universal de 1900  y se convirtió en uno de los edificios más  emblemáticos  de la ciudad. Además de disfrutar de obras podrán pasear por sus jardines que son realmente increíbles. 

Esta lista es breve pero hay  muchísimos museos más por descubrir: de moda, historia, arte moderno. Si te gusta el arte París es la ciudad para vos!